lunes, octubre 30, 2006

EL CAMINO Y LA META

"Estoy tratando de decir que no puedo vivir sin ti, que se me acaba el camino, y no se como seguir". Idolos de Barro.

Siempre voy corriendo intentando llegar a una meta. Esta mañana me he despertado con mucha angustia. Cuando he abierto los ojos solo podía pensar en una canción que una tarde adolescente de verano escuché en el coche de mi amigo Carlos. Decía algo así: "Te busqué al despertar, sin querer me enamoré ahora de tu sombra. Y lloré al recibir el primer rayo de sol que no viene de tus manos". Estaba en la cama, me levanté y una sensación extraña, un miedo paralizador y malo se apoderó de mi. ¿Y si le pierdo? - me preguntaba.

Ya en la calle, no pude evitar que mi mente escuchara la llamada a gritos de mi corazón y, aunque EL no estuviera presenté le vislumbré entre la multitud de madrileños estresados que cogen el autobús a las 8 de la mañana. Empecé a verle más alto de lo normal. No tenía que hacer grandes cosas para demostrarme que es único entre todos. Lo hacía cada día, cuando aparecía con barbas de cinco días a las 9 de la noche llamando a mi puerta para verme, cuando va a ver películas culturetas a algún multicine, cuando duerme conmigo...Estaba en el autobús y puedo jurar que nunca le vi tan guapo y tan inteligente. Fue entonces cuando me di cuenta de que a veces tener miedo puede resultar productivo, fue entonces cuando descubrí que realmente quería caminar a su lado siempre. Llévame donde sea, pero que sea contigo.

A veces las personas parece que estamos ciegos, ansiamos una meta y andamos.... Queremos ser héroes de un cuento inventado, que el príncipe nos rescate y casarnos con él. Pero... ¿Y si en todo ese proceso la príncipe nos abandona? ¿Que ocurre? Muy sencillo, se acaba el cuento. Para que esto no suceda hay que cuidar al príncipe, protegerle y valorarle. Porque el príncipe no es más valiente por el hecho de luchar contra un dragón, es valiente por tener el arranque de querer cuidar a su princesa. Con eso basta.

Esta mañana, cuando iba en el autobús pensaba en EL, en mi camino que se había ido poco a poco haciendo nuestro y en mi meta, nuestra meta, las metas. Le miraba entre la gente y mis ponzoñosos ojos estaban desorbitados. Me quedé asombrada. Habían pasado unos meses, le veía siempre, pero nunca le miré hasta que sentí miedo a perderle. Le miré, le miré mucho durante el trayecto de aquel autobús. Lo sentí, fue en ese preciso momento, cuando dejé de verle cuando caí en la cuenta el camino y la meta eran el lugar en el que ya estaba.

viernes, octubre 20, 2006

CANCER

Hay momentos en la vida en los que no te queda otra alternativa que mirarte a ti mismo. Pararte, serenarte y plantearte: ¿Y ahora que? Una tarde hace más o menos un año la que escribe decidió levantarse una hora antes, pedir permiso en el periódico e ir al ginecólogo. Teóricamente era una revisión rutinaria, hasta que apareció un dichoso bulto en mi pecho izquierdo. Tardaron dos semanas en darme los resultados de las pruebas que debían comprobar si aquello era bueno o malo. Nadie sabe lo que se me pasó por la cabeza durante esos 15 dias. Solo yo. Fue una angustia constante que no me dejaba trabajar, ni concentrarme... Se supone que soy periodista y que debía estar al tanto de todo lo relativo a la enfermedad, pero si les soy sincera no quería saber nada del tema. No quería oír la palabra "cancer".

Al cabo de las dos semanas me dieron la resolución de las pruebas. "Esto no es nada, es grasa"-me dijo el médico. "Llevas una vida que no es normal, Sara, y eso te está volviendo loco el cuerpo. Plánteate la opción de parar un tiempo. Tu misma". Si les digo la verdad, cuando me enteré de que no tenía cáncer me puse más contenta que unas castañuelas, pero seguí llevando el mismo tipo de vida. Después vinieron más achaques.

Ha pasado un año de todo esto. Hace una semana volví a mi revisión rutinaria y por primera vez escuché la siguiente frase de mi doctor: "Parece que todo se va normalizando... ". Y es cierto. Esta mañana, día mundial del cáncer de mama, he asistido a una rueda de prensa en la que habían diferentes oncólogos y ginecólogos y a raíz de escuchar varias historias de mujeres que no tuvieron, por desgracia, la misma suerte que yo; me he puesto a recordar aquello que me pasó hace un año. Dónde estaba y dónde estoy... ¡Quién me ha visto y quién me ve! Bienaventurados aquellos que son valientes para dar un cambio en sus vidas, no rendirse ante la dificultad y luchar por lo que realmente merece la pena.

lunes, octubre 16, 2006

SOBRE LA NORMALIDAD

Quiero mostrar lo que ocurre dentro y fuera de nuestras fronteras, quiero que vean lo que yo veo. Quiero fabricar sus sueños...

A mis compañeros Bruno y Santy, por ser mis manos.

Hay días que no se pueden olvidar. El mío no tiene desperdicio alguno. Les cuento: Desde hace una semana me he dado cuenta de que no soy dueña de mi cuerpo, mis compañeros Santy y Bruno se han convertido en mis manos, Charo y Juan Carlos son mis piernas, Paco y Julio mis brazos... Habíamos pasado una mañana agotadora ordenando mil imágenes, repasando el preguión, haciendo gestiones, hablando con el ambientador musical... ¡Casi me vuelvo loca! Mil papeles, un ordenador y Óscar rebatiéndome las ideas. "¡Me pones nerviosaaaaaa! Menos mal que dentro de 24h no me estarás aguantando"- le dije.

Entonces fue cuando ocurrió. Oscar abandonó la sala de montaje y Bruno, Santy y yo mantuvimos la siguiente conversación, mientras recogíamos las cintas (disculpadme compis que la reproduzca de forma más o menos literal).

-- SANTY: Vaya mierda de todo... En menos de 48h a la puta calle. ¿Qué vais a hacer a partir del miércoles?

-- BRUNO: Reponer en Carrefour. Voy a pasar de grabar con una cámara a colocarla en un estante para que un pijo se la compre. ¿A que mola?

--SARA: Porqué no pruebas en una tele como PPTV, allí seguro que te pillan fijo...

--BRUNO: Paso. Soy como un Electroduende y no me mola eso de que me enseñen a desaprender. Algún día llegará la oportunidad de hacer algo realmente bueno...Pero hasta entonces curraré para sobrevivir y seguiré grabando mis cosas, mejorando, viendo cine trabajando para mi que es lo que realmente vale. ¿Y tú, Sara? ¿Qué harás a partir del miércoles?

--SARA: Me ha salido un curro decente en una editorial de revistas de moda. El día que más tarde salgo es a las 18.00h. Me pagan bien...

--SANTY: Joder, vas a poder tener una vida normal. ¡Que suerte!

--BRUNO: Sara y una vida normal... Me suena a chino.

--SARA: Señores, esto se acaba. Por si mañana con el estrés se me olvida, quería decirles que están como una cabra, que son un par de lunáticos, enfermos de no se qué cosa rara...

--SANTY: Daría la vida por conocer a Mario Camus...

--SARA: ¿Me dejan terminar? Quería decirles que no dejen de ver tanto cine, que no paren de crear cosas, de escribir... Es la primera vez que trabajo con dos locos ¿Y saben qué les digo? Que ha sido un placer. Gracias por enseñarme tantas cosas. A partir de mañana me iré con mi vida normal a otra parte.

--SANTY: ¿Normal? Tú nunca serás normal, porque vives en otro mundo. El que te creas cada día cuando escribes una línea en un papel y la intentas traducir a una imagen. La vida es sueño, Sara, la vida es sueño...

Salimos del IORTV, la tarde estaba gris, y yo ya tenía asumido que la vida de Santy, la de Bruno y, sobre todo, la mia en 48h iban a cambiar. "Lo mismo hasta me gusta y todo..."- pensaba para mi misma... ¿Quién sabe?

lunes, octubre 09, 2006

PARA SIEMPRE

Siempre estuve de acuerdo con Bunbury en que nada es para siempre. Pero ahora pienso lo contrario, que hay cosas que si pueden durar. Lo que no te mata te hace más fuerte y después de esta noche lo siento más intenso que nunca. Probablemente me haya quitado la única espinita que llevaba clavada en el corazón y que me hacía sangrar de vez en cuando. No se cuantos años estaré en esta vida, pero lo que si tengo claro es que quiero vivirlos junto a EL. Quiero que me despierte su mirada, no verla envuelta en llanto jamás. Quiero quererle y que me quiera, que sea feliz, que me sonría... Quiero ser lo que ya no se lleva, lo que no está de moda... Quiero que sea para siempre.

Amarte es pagar el precio del silencio,
las nocjes contínuas con la ausencia de tu piel, las horas eternas sin escuchar tuvos,
los días tristes cuendo te siento lejos estando tan cerca.

Amarte es pagar con soledad un minuto de alegría,
es ser feliz con un beso,
es vivir de nuestra esperanza y soñar tu sueño.

Amarte es entregarme a ti sin miedo,
es adorar tu mirada,
es esperar nunca nada, sencillamente ser de ti.

Amarte es recibir tanto amor, y sentirme llena después.
Amartes es intentar cambiar los hechos del destino
es borrarlos y querer escribirlos más divinos
es desear que en un minuto cambie el tiempo.

Amarte es soportar el presente y aceptar que todo será diferente
Amarte es extrañar tus caricias cuando estás ausente
es cerrar los ojos por la noche para sentir que estás presente
es llevar en el corazón la llama ardiente que tú enciendes
y que por una vez el alma me dice que permanecerá para siempre.

domingo, octubre 08, 2006

NI FRIO, NI CALOR

¿Han sacado ya la ropa de invierno?. La que escribe lo ha hecho esta mañana, se lo dije a Cris "Amiga, tengo la habitación hecha una leonera, los jerseys nuevos de temporada tirados por el suelo y tengo que ordenarlos". El tiempo en el que no hace ni frio ni calor es un coñazo. No sabes que ponerte porque en una tarde te asfixias y después te congelas. El termómetro pasa de unos grados a otros rápidamente y luego te acartarras. Un pelmazo.

Son periodos inestables, necesarios para la vida, pero incómodos para los que los sufren. Últimamente estoy como el tiempo. Ando nerviosa a causa de la incertidumbre que me rodea. Tomo decisiones muy rápido y siento que todo se me tambalea. Lo bueno de todo esto, es que en el fondo, aunque parezca que navego sin rumbo, siempre se el destino al que quiero llegar tanto en mi vida profesional como en la personal.

Señoras y señores les haré una confesión: Me estoy volviendo loca. Sí, lo se, no es nada nuevo.... Pero cada día que pasa soy más consciente de mi estado de alienación. No quiero lo mismo que el resto del mundo, tampoco pienso igual que el resto, ni siquiera amo como me dicen...

Hoy he vuelto a discutir con EL. Me miro al espejo y me echo a llorar. Cuando pasan 5 minutos, vuelvo a observarme y pienso que así no voy a ningún lado. ¿Por qué todo es tan complicado? ¿Por qué cuando consigues fundir el hielo recuerdas lo que te costó hacerlo? ¿Por qué tuve que fundirlo? Como les dije antes, parece que no se donde voy, pero siempre al final acabo en el destino correcto porque es el que yo he elegido.

He decidido tener broncas mínimas. Pero a veces se me hace difícil... Las marcas de sus relaciones anteriores, mi forma de ser, la suya, mis dudas, las suyas... En fin, supongo que es normal, que forma parte del juego. Pero eso me pone mala. Me da miedo que le pasen las mismas cosas de antes. Yo que se... ¿Qué les voy a contar?

Es lo que ocurre cuando se juntan dos personas diferentes que se han educado por separado y vivido circunstancias distintas... Espero que EL y yo lleguemos a formar un buen equipo... Dicen que podemos llegar a hacerlo, pero a veces es complicado. Aprender a ceder para beneficiarse los dos es jodido.

En las situaciones extremas es cuando todo se ve, igual que en el tiempo. Cuando te pelas de frío, pillas un abrigo; cuando te asas de calor te lo quitas... Esto es menos desconcertante que cuando no hace ni frío ni calor... Y no sabes que ponerte. Se lo decía esta tarde a Cris: "A veces, amiga, soy imbécil". Espero que cambie pronto el tiempo, por lo pronto me voy a ordenar mi cuarto, que está hecho una leonera....