lunes, julio 31, 2006

BUSCO A MAX ESTRELLA
When the days they seem to fall through you, well just let them go. Blur. The universal.

No hay nada mejor que pasar tiempo con una persona para llegar a conocerla... Hoy he tenido una cita... ¿Saben con quien? Conmigo. Lo necesitaba. Gafas de ver, un buen libro y música inglesa. No se porqué hoy no quería que nadie me hablara en mi idioma. No estaba triste, pero tampoco demasiado alegre. Supongo que hoy era "uno de esos días"... Seguro que ustedes también han tenido muchos así...

Podría haberme amargado, pero no lo he hecho, la vida tiene demasiadas complicaciones como para ser uno mismo el protagonista de su propia complicación. ¡Al cuerno! Como dice la Madama Collet en Luces de Bohemia: No desesperes, Max, otra puerta se abrirá...

¡Me encanta ese libro! Desde hace años lo he tenido como mi pequeña Biblia. Hoy he dado mil vueltas por Madrid intentando encontrar a Max Estrella (o Mala Estrella, como él se empeña en llamarse). Le diría tantas cosas...

Hoy he disfrutado mucho intentando superar mis demonios, no les voy a engañar. Tras caminar durante más de una hora, he ido a parar al callejón del Gato, me he sentado en una terraza y me he tomado una Coca- Cola. Por un instante me he imaginado la siguiente escena: La que escribe en una mesa leyendo Luces de Bohemia, John en la de enfrente con un libro de Alicia en el país de las maravillas y, en medio de los dos, el soñador de Max Estrella poniendo verde a una España inculta, absurda, y hambrienta diciendo: ¡Canallas!... ¡Todos!... ¡Y los primeros nosotros, los poetas!

Después de imaginarme el sainte, señores, no me quedó otra que sonreir.

sábado, julio 29, 2006

JUGAR CON LAS SOMBRAS DEL PASADO
Quisiera ser la que fui y no una sombra tras de ti...

Esta sobremesa he estado hablando con mi amigo David y recordamos juntos la conversación que tuvimos hace tres meses. Me dijo que las cosas con su chica iban mal, que lo dejaron hace 8 meses, que no quiere volver con ella; pero que no puede olvidarla. Me quedé callada y tras pensarlo mucho le dije: "¿Sabes cual es el error más frecuente en el ser humano? Equivocarse".

Parece que no, pero hasta los que parece que no sentimos ni padecemos hemos llorado en más de una ocasión por una relación fallida. Y mucho. Siempre lo he dicho: Las personas valen más por lo que callan que por lo que cuentan. Pero... ¿De que vale equivocarse si no aprendes de ello?

Nunca se puede empezar una relación sin haber superado la anterior. De lo contrario, puede peligrar el presente y el pasado se puede convertir en el más amargo de los futuros. Esta tarde le comenté el tema de mi columna mi gran amigo John. Le planteé la siguiente cuestión: ¿Es positivo o negativo jugar con las sombras del pasado? Él me contestó que es necesario, en el caso de que esa "sombra" no esté aparcada en nuestra mente, sino que de vueltas constantemente por la cabeza y nos preguntemos: "¿Que podría haber sido de esta chica/o si ...? ¿Es mi amante? ¿Podría haber sido mi novia? ¿Y si lo intentara...?". Es lo que yo llamo cuentas pendientes, son peligrosas; pero hay que saldarlas.

Hay que clasificar a las sombras para lograr que se queden quietas en nuestra mente y no interfieran en nuestro presente. El caso de David era claro, solo le faltaba verlo. Sabía en el fondo de su ser que Mónica no era la mujer de su vida, aunque creía firmemente en ello cuando estaba con ella. Discutían, vivieron una relación intensa, compartieron muchas cosas... Hoy, después de comer, me contaba como lo superó: "Me pasé meses hablando con ella tras cortar. Un día me levanté de la cama, me miré al espejo y empecé a valorarme. Me quedé solo y descubrí que no me quedaba nada por descubrir de Mónica. Ya sabía lo que había y no me gustaba por mucho que me jodiera". Cuando tomábamos café le llamó una tal Ana y tras colgarla me dijo: "No me merecía todo aquello que para mi era normal. Mónica siempre será una parte de mi vida, pero es pasado y eso será. Ya no hablamos. ¿Para que? Ya se lo que hay. Se va a quedar en mi mente, en ningún sitio más. No quiero cagarla con Ana, no se lo merece. Yo tampoco". No me quedó otra que sonreir, alegrarme por David y darle las gracias por haber sido justo con Ana.

Hace poco yo también terminé de clasificar mis sombras. Había unas cuantas. Pero una sobretodo me atormentaba, aparecía una y otra vez. ¿De que servía mantenerla ahí? YA SE LO QUE HAY. Así que la aparqué definitivamente en un rincón cuando me enamoré de EL. Las sombras, son eso: Sombras. A no ser que ustedes quieran que se conviertan en otra cosa... Salden sus cuentas,no se queden nunca con las ganas, descubranlo todo, sufran... Llenense. ¡Jueguen con las sombrasdel pasado! ¡ Diviértanse! Pero asuman el riesgo: Pueden perder su presente. Reconozco que me encanta arriesgar, pero siempre lo hago por cosas que merecen la pena.

jueves, julio 27, 2006

VOCES EN SILENCIO
En tu silencio habita el mío...

El grito se desvanece por mi garganta y desemboca en el silencio, ese silencio que me enmudece la voz. Nunca pensé que podía ser tan necesario como respirar. Percibir que todo lo de tu alrededor sobra y vives en un mundo a parte, tu mundo, ese en el que solo habitas tú y quien quieras que habite. Ese lugar dentro de la realidad en el que todo no tiene nombre porque te dedicas a sentir.

Normalmente hablamos demasiado, miramos poco y escuchamos menos todavía. Charlamos tanto, que somos incapaces de ver más allá de nosotros. Nuestras palabras tapan lo importante y dejan ver lo urgente. Siempre sucede lo mismo… A veces, lo mejor ocurre cuando estamos callados. El silencio, en muchas ocasiones, acalla la más potente de las voces.

¿Nunca se les han quedado cortas las palabras? Hay muchos idiomas capaces de llegar donde ellas no alcanzan. Los momentos más bonitos de la película de nuestra vida son aquellos en los que no hay banda sonora, ni ruido, ni nada… Son los instantes mudos, en los que se para el tiempo, porque estás tan metido en la escena que no eres capaz de ver más allá de esa realidad que parece ficticia.

Hacía demasiado tiempo que no me paraba a escuchar las voces del silencio...

viernes, julio 21, 2006


UN BOTE DE TOMATE

Me gustaría darle las gracias, pero solo se escribir...

Todo empezó en el súper comprando un bote para hacer una salsa bologñesa. Fue entonces, cuando navegando entre todo el maremágnum de tomates fritos, triturados, al natural, en brik o en tarro de cristal cuando descubrí que era una chica realmente afortunada.

Creerán que he perdido el juicio, pero no es así. Las vueltas que da la vida... ¿Verdad? Hace un año la que escribe en lo último que pensaba era en comprar un bote de tomate. Fijénse, ahora se ha convertido en una de mis principales preocupaciones.

Las cosas han cambiado. Ya no amanezco en un ático de Gran Vía, no sueño con vislumbrar el cartel de Sweppes cuando abro los ojos (¡Qué agobio!), tampoco anhelo aquellas noches, ni aquellos días...

Mientras miraba el bote de tomate he vuelto la vista atrás y por primera vez en muchos años he sonreido. Ahora puedo comprar el tarro, porque tengo tiempo; ahora puedo compartir su contenido, porque tengo con quien hacerlo.

Sí, señores ya no sueño con lo mismo de antes o sí... ¿Quién sabe? Lo que es cierto, es que he descubierto cosas estupendas que me hacen sentir feliz. A veces me gustaría transmitirles con palabras todo lo que me está pasando por dentro, pero soy incapaz. Y lloro cuando redacto estas líneas porque ya no tengo miedo a mirar atrás, porque resulta que "aquel castigo", "aquellos malos ratos" me han hecho descubrir una de las cosas más bonitas que me han pasado en esta vida.

Comprar un bote de tomate me hace feliz. Últimamente cuando la gente me pregunta: ¿Qué te queda de tu pasado?. Respondo con una sonrisa: Mi presente.

miércoles, julio 05, 2006

EL VERDADERO SALVAVIDAS

Hoy he vuelto a tener uno de esos sueños que te dejan sin aliento. No piensen mal, ojalá hubiera sido tan agradable como esos en los que te despiertas con ganas de más; pero para mi desgracia no ha sido así.

¿Nunca se han visto sumidos en una situación en la que necesitan que alguien les salve? Esta noche mi principito ha tenido que venir a rescatarme de las garras de un pasado que mi psique sigue recordando. Les contaré mi sueño:

Estaba en la puerta de uno de los periódicos más importantes de este país, donde trabajé durante varios años. Mis compañeros pasaban por delante de mi sin hacerme caso, y yo solo sentía que no quería volver a vivir la horrible pesadilla que me postró en una cama durante dos semanas en mi vida. Ha sido un sueño extraño en el que se mezclaban la realidad y la ficción. Mi sueño finalizaba con EL, que aparecía como por arte de magia y me preguntaba: "Sara, ¿Qué te pasa?". Yo le contesté: "Tengo el alma desgastada de tanto llorar. Sabes que cuando me comprometo a algo lo cumplo. Me casé con esta profesión y ahora no se si quiero divorciarme".

Hace poco paseando junto a mi amigo Mariano por el parque de nuestro barrio, descubrí que había malgastado el tiempo en personas que parecían mis amigos y que en realidad no lo eran. No les voy a engañar en el fondo de mi ser me estoy cuestionando todo lo que pasa a mi alrededor. Mi relación con el periodismo no está pasando por un buen momento.Supongo que es normal, a todas las parejas les pasa... (Ahí se demuestra si el amor es de verdad o era- como ya les comenté un día un enamoramiento de goma) Actualmente parece que tengo un poco más de tiempo para pensar. Me he dado cuenta de que lo que para mi antes era un sueño, ahora volver a vivirlo sería una auténtica pesadilla.

Sentada hace poco junto a Marius en aquel banco, me di cuenta de que a pesar de todo lo mal que lo estoy pasando, tengo muchísima suerte porque la vida me ha dado la oportunidad para diferenciar y hacer limpia a tiempo de todo aquello/os que eran un mero elemento de atrezzo en mi vida y, que como tal, a la hora de la verdad no servían para nada, solo para adornar (y a veces ni para eso).

Es verdad, a veces los seres humanos necesitamos que nos salven. Recuerdo que en una de sus últimas conversaciones mi amigo Alex me dijo: "Deja de intentar rescatar a todo el mundo, porque como te descuides el barco se hunde. Necesitas que por una vez alguien te salve a ti".

Hoy, a pesar del sueño, me he levantado tremendamente optimista. Y he decidido hacer una lista de aquellos que AHORA están, y me he sorprendido. Uno de los motivos que me llevaron a dedicarme a la profesión de contar cosas fue buscar la VERDAD. Tras escribir estas líneas, y llegar a la conclusión de que no se que va a ser de mi después de la publicación de este artículo, he decidido salir a la calle, hacer unas cuantas llamadas y disfrutar de todo lo verdadero, de aquellos que me están lanzando un SALVAVIDAS cuando las aguas están revueltas. A todos ellos mil gracias.

lunes, julio 03, 2006

AQUELLO QUE ME DISTE
Y dudas de mis dudas
de mis ritos, de mis ruinas.
entre siempre y jamas
nadé desnudo tu oleaje (...)

Con el disfraz sin estrenar
di el salto a lo fugaz
la ficción es y será
la única realidad.

Heroes del Silencio. "La espuma de Venus".

Con el tiempo y , sobre todo, con las experiencias algunos tenemos la suerte de de alcanzar "ese momento" en el que los relojes se paran de repente. Ese instante en el que el mar habla y todo lo demás permanece inerte. En silencio, la brisa te acaricia la cara y tú solo necesitas estar callado para conseguir la paz. Cada ola que rompe se lleva consigo trozos de un ayer que no existe desde que le conocí.

Abro los ojos, y solo veo azul, un azul inmenso que se pierde en el infinito. Azul, color de la calma, del tesoro que he buscado y que tras mucho andar, encontré tumbada en la orilla de la playa. A su lado, ante el más sepulcral de los silencios.

Y hasta aquí he llegado. No se si es un comienzo, el final, o la continuación de un sentimiento tan profundo que se sumerge en lo más interior de mi alma, poco a poco, para salpicarla de humanidad.

¡Por fin descubro la tranquilidad! Y lo he hecho junto a ÉL, a través de su silencio, de ese silencio tan mio, tan suyo, y a la vez tan nuestro. Por primera vez, siento que hablamos el mismo idioma.
Tranquila, con mi disfraz sin estrenar, decido dar el salto al deseo fugaz para entregarle lo único eterno que poseo. La profundidad de su mirada refleja un alma transparente. No necesito mediar palabra, porque casi todo me sobra.

La marea en mi interior sube con calma, sin alborotarme. Lentamente se introduce dentro de mi cuerpo, me atraviesa el corazón despacito, revuelve mis sentidos hasta enloquecerlos y navega a sus anchas por mis venas. Ya forma parte de mi, lo llevo dentro.

Nunca olvidaré aquello que me diste.